El tipo de toallero más habitual es el toallero de barra, que consiste en una varilla adosada a una pared. Puede contener toallas de mano o toallas de baño según el estilo, y es un elemento común en los baños.
toalleros vienen en una variedad de formas y estilos, desde barras tradicionales hasta diseños innovadores que tienen un propósito funcional que no es simplemente sostener toallas. Por ejemplo, un toallero con calefacción hidrónica usa agua caliente para calentar y secar las toallas, lo que puede ser útil en invierno o durante la temporada del monzón cuando puede ser difícil secar una toalla.
Si su baño es pequeño, considere instalar dos toalleros para colgar el doble de toallas a la vez. Este ingenioso truco puede ahorrar espacio y garantizar que cada invitado tenga su propia toalla.
Otra opción para guardar toallas es convertir una papelera, cesta u organizador existente en un toallero. Por ejemplo, estos cubos de mimbre equipados con divisores diagonales pueden contener cuatro toallas enrolladas y guardarse perfectamente en los estantes del armario cuando no se usan.
Los toalleros con calefacción se han vuelto cada vez más populares en los últimos años, ya que aceleran el proceso de secado y pueden reducir el riesgo de crecimiento de moho o hongos. Estos dispositivos se pueden comprar en una variedad de tamaños y son una gran adición a cualquier baño.